-REFLEXIÓN-

Durante el semestre en la materia de sistemas y procedimientos, descubrí que la eficiencia organizativa no es solo un ideal, sino un objetivo alcanzable mediante la comprensión y aplicación de estructuras cuidadosamente diseñadas. Mi perspectiva se transformó al ver las organizaciones como sistemas dinámicos e interconectados, donde cada procedimiento constituye una nota esencial en la sinfonía del éxito. La importancia de mantener coherencia y adaptabilidad se hizo evidente, y llegué a comprender que los sistemas más efectivos son aquellos capaces de evolucionar con el tiempo.
 

Aparte, esta materia me proporcionó las herramientas necesarias para identificar áreas de mejora y desarrollar procedimientos específicos que no solo aborden los problemas actuales, sino que también anticipen los desafíos futuros. La habilidad para la planificación estratégica se volvió fundamental, y entendí que la implementación exitosa de sistemas y procedimientos no solo requiere conocimientos técnicos, sino también una comprensión profunda de la cultura organizativa y la promoción de la colaboración entre equipos.